Si estás leyendo esto, seguro tienes unas perlas que amas y quieres que se vean siempre radiantes. Limpiar perlas no es lo mismo que limpiar otro tipo de joya, ya que requieren cuidados especiales porque son delicadas.
Te enseñamos el paso a paso de cómo limpiar las perlas, cómo evitar que se amarilleen y por si fuera poco, cómo conservar tus perlas naturales para que duren por años.
¿Por qué tus perlas pueden perder el brillo o volverse amarillas?
Antes de conocer cómo limpiar las perlas, es importante entender qué puede causar que se opaquen o amarilleen:
- Exposición al sol, calor o ambientes muy secos.
- Contacto con perfumes, cremas, maquillaje, fijadores de cabello. Estos productos tienen químicos que dañan la capa nacarada de la perla.
- Sudor y aceites naturales de la piel. Al usar agua dura o con minerales, estos residuos se quedan en la superficie.
- Almacenamiento incorrecto: perlas en bolsas plásticas, exposición prolongada a aire seco, o sin limpieza después de usar.
Este deterioro gradual puede hacer que te preguntes cómo blanquear perlas amarillentas, o incluso cómo limpiar un collar de perlas que ya tiene un tono opaco.
Cómo limpiar las perlas, pasos seguros
Aquí tienes una rutina confiable de cómo limpiar las perlas sin dañarlas:
Limpieza rápida después de usarlas
Cada vez que uses tus perlas, pásales un paño suave ligeramente húmedo (agua tibia) para quitar sudor, polvo y grasa. Esto evita acumulaciones.
Limpieza más profunda ocasional
- Mezcla agua tibia con un jabón suave, de preferencia, sin fragancia ni ingredientes agresivos.
- Moja un paño suave (no uses cepillos duros) y limpia cada perla con cuidado. No sumerjas completamente si las perlas están ensartadas en hilo de seda o similar, ya que esto puede debilitarlo.Enjuaga con un paño limpio humedecido para eliminar restos de jabón.
- Déjalas secar al aire en una superficie suave y plana antes de guardarlas.
¿Cómo blanquear perlas amarillentas?
Si ya notas amarillez, puedes intentar estos métodos suaves:
- Usa una solución jabonosa suave y limpia como se describió.
- Evita remedios caseros agresivos (como vinagre fuerte, bicarbonato de sodio abrasivo, lejía) porque esos dañan el nacre.
- Asegúrate de que se sequen bien y que no haya humedad atrapada.
¿Cómo limpiar un collar de perlas?
Los collares tienen un problema extra, la cuerda/hilo con que están ensartadas las perlas puede debilitarse con la humedad. Al limpiar:
- No flexiones demasiado el collar.
- Usa la solución suave con paño, nunca sumerjas el collar entero durante mucho tiempo.
- Verifica regularmente que el hilo esté en buen estado, sin desgastes ni decoloraciones.
Cuidados preventivos, para que dejes de preguntar “cómo limpiar las perlas” seguido:
Para evitar tener que limpiar demasiado seguido, haz esto:
- Ponte las perlas después de usar perfumes, cremas o maquillaje.
- Guárdalas separadas de otras joyas, en bolsas de tela o en estuches suaves, preferiblemente de algodón o seda. Evita bolsas plásticas herméticas.
- Mantén un nivel moderado de humedad en donde las guardas, ya que la sequedad puede hacer que amarilleen y que el hilo reseque.
- Evita exponerlas al sol directo por períodos largos.
- Limpia ligera y frecuentemente. Una pasada rápida con paño suave ayuda muchísimo.
Errores comunes que dañan las perlas naturales
Muchas personas que no saben cómo limpiar las perlas, cometen estas equivocaciones cuando quieren limpiar perlas naturales, lo que termina empeorando el problema:
- Usar productos con alcohol, amoníaco, bleach o agentes químicos fuertes.
- Sumergir el hilo completamente por mucho tiempo.
- Exponerlas a temperaturas muy altas o rayos directos de sol.
- No secarlas bien antes de guardarlas.
- Almacenarlas junto con otras joyas que puedan rayarlas.
Ejemplo práctico sobre cómo limpiar tus perlas naturales tú mismo
Te proponemos una rutina que puedes seguir:
- Llena un recipiente pequeño con agua tibia (no caliente) y agrega unas gotas de jabón suave.
- Humedece un paño de microfibra o algodón limpio y pásalo sobre cada perla.
- Enjuaga con otro paño húmedo sin jabón.
- Coloca las perlas sobre una toalla de algodón, dejándolas secar al aire completamente (mínimo unas horas).
- Guarda el collar o aretes en un estuche suave, que quede sueltito, sin tensiones.
Repetir este cuidado cada mes si las usas seguido, o cada vez que notes la joya opaca.
Preguntas frecuentes sobre como limpiar las perlas
¿Cada cuánto debo limpiar las perlas?
Depende de cuánto las uses. Si las usas frecuentemente (varias veces por semana), basta con limpiarlas suavemente cada vez y darles una limpieza más profunda cada mes. Si las usas poco, cada dos o tres meses puede ser suficiente.
¿Se puede usar pasta dental para blanquear perlas amarillentas?
No lo recomendamos. Las pastas dentales suelen tener abrasivos que pueden rayar el nacre y justamente empeorar el problema.
¿Puedo usar ultrasonidos o vapor para aprender a cómo limpiar las perlas naturales?
Mejor no. Los dispositivos de ultrasonido o vapor pueden dañar la estructura interna de la perla o debilitar el hilo que las une. Lo mejor es optar por métodos manuales suaves.
¿Qué hago si las perlas están muy amarillas y los métodos caseros no funcionan?
Ahí sí conviene acudir a un profesional especializado. En algunas joyerías se hace limpieza profesional y posiblemente restaurar parte del brillo con tratamientos adecuados.
¿Por qué confiar en Herzog Perlas para cuidar tus joyas con perlas?
En Herzog Perlas sabemos lo que significa tener joyas con perlas hermosas y duraderas. Por eso:
- Usamos perlas naturales de alta calidad que soportan bien el uso diario si se cuidan.
- Nuestros productos vienen con recomendaciones claras de limpieza y un estuche suave para su conservación.
Queremos que tus perlas brillen siempre y que cada vez que te las pongas, recuerdes que elegiste algo bonito, pero también bien hecho.
Conclusión
Limpiar perlas no es un proceso complicado, pero sí requiere cuidado, constancia y los métodos correctos.
Saber cómo limpiar las perlas naturales, o incluso cómo blanquear perlas amarillentas desde casa te ahorrará tiempo, dinero y evitará daños irreversibles.
Si te comprometes a cuidarlas bien cada vez que las uses, guardarlas con atención y emplear los cuidados que viste aquí, tus perlas seguirán radiantes siempre.
